Embarcaciones son abordados en el lago Itaipu.
A una semana de la conclusión de la operación de Ágata-Sur, que incautó más de 8 toneladas de drogas en 15 días de trabajo, en Brasil se inició de vuelta la segunda fase de la Operación Fronteras Integradas, que abarca los estados de Paraná, São Paulo, Mato Grosso do Sul, Santa Catarina y Río Grande del Sur. Las acciones apuntan a lo mismo de siempre, combatir delitos transnacionales, como el tráfico de droga, armas, municiones y contrabando de todo tipo de mercaderías desde Argentina y Paraguay.
En Foz de Yguazú, la operación fue lanzada durante un acto desarrollado en la Plaza de la Paz. Se movilizan el 14.º Batallón de Policía Militar (BPM), la Policía Civil, Militar y Federal, Receita Federal, Guarda Municipal y el Instituto de Transporte y Tránsito (Foztrans).
Se trata de acciones simultáneas se enfocan al combate y prevención de crímenes trasnacionales como el contrabando, tráfico de armas y drogas, entre otros ilícitos, en la frontera con Paraguay y Argentina.
Jefferson da Silva, comandante de la Policía Militar de Paraná, destacó la colaboración de las diferentes instituciones locales y estatales. “Con esta integración, conseguimos mapear más rápidamente las diferentes rutas utilizadas por los criminales y eso posibilita una acción más rápida de las fuerzas policiales”.
Las fuerzas de seguridad refuerzan las acciones preventivas y represivas en caminos vecinales, urbanas y rutas nacionales, sectores bien identificados como vías utilizadas por las organizaciones criminales que operan en la región de frontera. Las acciones contemplan patrullaje y bloqueos tácticos, cumplimiento de órdenes de capturas, abordaje y fiscalización de vehículos y personas.
PRESIÓN
Desde que asumió el gobierno de Brasil Luiz Ignacio Lula da Silva, se vienen multiplicando las acciones de control fronterizo. En el primero semestre ya van 6 operaciones de gran magnitud. Por lo general, este tipo de maniobra se solían realizar dos veces al año, generalmente en las vacaciones de julio y en diciembre.
La semana pasada concluyó la operación Ágata-Sur. Esta movilización contó con el respaldo del ejército brasileño brasileño. Las acciones se desplegaron en los estados brasileños de Paraná, Rio Grande Do Sul y Santa Catarina.
El balance divulgado señala que el golpe a los contrabandistas y traficantes llegó a los 8 millones de dólares americanos. Fueron incautadas un total de 8,6 toneladas de drogas, principalmente marihuana, 68, 3 toneladas de productos agropecuarios y de pesca ilegal, 12 vehículos y 8 embarcaciones.
Un total de 24 personas fueron detenidas durante las intervenciones. Todas fueron puestas a disposición de organismos de seguridad pública, para los procedimientos correspondientes, en derecho. Fueron movilizados 4 mil efectivos y agentes policiales que desarrollaron acciones por tierra, agua y aire.
Este es el resultado de 15 días de operación integrada entre la Marina, Ejército y Fuerza Aérea del Brasil, en coordinación con organismos de seguridad y de fiscalización federal y estatal. La nueva operación no tiene plazo de conclusión.
La Clave